Parque de las Ruinas de Huangchenggen

Para apreciar los ginkgos, no es necesario ingresar a los jardines o templos imperiales, también se puede salir a las calles. El Parque de las Ruinas de Huangchenggen brinda una oportunidad así. Como sugiere el nombre, el Parque de las Ruinas de Huangchenggen se construyó sobre la base de las partes restantes de la Ciudad Imperial del Este. Los árboles de ginkgo se plantaron naturalmente después de la construcción y se convirtieron en una característica importante del parque.

Desde la dinastía Yuan, la ciudad de Beijing se ha compuesto de tres partes: la Ciudad Prohibida en el centro, la ciudad exterior en la periferia y la Ciudad Imperial entre el "centro" y la "periferia". La Ciudad Imperial fue demolida en los primeros años de la República de China, y a principios del siglo XXI, se construyó el Parque de las Ruinas de Huangchenggen. No sólo es agradable a la vista por sus cuatro paisajes principales: las orquídeas y flores de ciruelo con lluvia primaveral, el verano fresco con la fuente imperial, el paisaje otoñal del arce plateado y los pinos y bambúes verdes en invierno, sino que también se ha convertido en un corredor histórico y cultural debido a los numerosos sitios conmemorativos famosos de la historia moderna de China a lo largo de la calle. Si camina usted de sur a norte, podrá ver famosos edificios modernos como la Asociación de Eruditos Retornados del Occidente, la Antigua Residencia de Lao She, el Edificio Rojo de la Universidad de Pekín, la Universidad Sino-Francesa, etc.

Las ruinas de Dong'anmen excavadas por los arqueólogos durante la construcción del Parque de las Ruinas de Huangchenggen también se exhiben parcialmente aquí a través del área de exhibición hundida.

Lugar cercano frecuentado por las celebridades de Internet:

El Parque Jingshan cuenta con lugares escénicos como el Pabellón Qiwang, el Pabellón Wufang, el Salón Shouhuang, el Salón Yong'en y el Jardín de Peonías... El Pabellón Wanchun en el pico central está ubicado en la altura dominante del Eje Central de Beijing, disfrutando de las ventajas geográficas. Después de subir a la cima de la colina, mirando alrededor, desde el lado sur del pabellón, se puede tener una vista panorámica de toda la Ciudad Prohibida. Las paredes rojas y las tejas doradas están cubiertas por una puesta de sol anaranjada, que es muy preciosa. Desde el oeste se puede ver el lago Beihai, árboles verdes y la pagoda blanca, que se complementan entre sí. Cuando llega el otoño, las hojas se vuelven amarillas y el paisaje otoñal aparece por todas partes. Las hojas amarillas marchitas vuelan por todo el cielo como hermosas mariposas amarillas. Y se duplica la belleza general del Parque Jingshan. Las paredes rojas, las tejas amarillas, el cielo azul y los árboles de ginkgo son tan hermosos que ni siquiera se quiere parpadear. Cuando camina usted hasta la cima de la colina Jingshan en otoño, se ve no solo los árboles de ginkgo, sino el color amarillo del otoño y las paredes rojas de la Ciudad Prohibida, que se complementan entre sí. Las vicisitudes de la historia hacen que la gente reflexione aún más.