SANYA, 14 ago (Xinhua) -- Multitudes de personas y el sonido de voces y risas de niños pueblan toda la extensión de la avenida comercial Atlantis Sanya, en la Bahía de Haitang de la turística isla de Hainan, en el sur de China.

El verano es un período fantástico para el negocio turístico en Sanya, en especial en estas vacaciones estivales, con la epidemia de COVID-19 básicamente bajo control y los turistas amontonándose bajo el sol en las playas, tal como han estado anhelando por mucho tiempo.

Entre la gran cantidad de tiendas de Sanya, es particularmente llamativa una que posee su nombre en español: "Agua Bendita". Llena de coloridos trajes de baño y accesorios, ofrece la imagen de un mundo exótico.

Al dar el primer paso dentro de Agua Bendita, uno se siente atraído por los múltiples patrones de diseño y los llamativos colores de los trajes de baño: flamencos, palmera, que transmiten la sensación de estar en una playa tropical.

"Puede probar este. Es un estilo de bordado a mano. Se ve muy adecuado para usted", explica a una cliente con paciencia Zhong Shiyu, gerente de la tienda.

Según su parecer, esta marca llegada desde Colombia ha sido acogida cada vez por más consumidores chinos desde que ingresó a China en 2014. Las bases de la marca se encuentran en las ciudades de Sanya y Chengdu, y ahora están planificando abrir otra tienda en Xi'an.

Hoy en día, con la creciente comodidad del transporte, la cultura de playa es más popular entre turistas de todo el país. Muchos eligen Sanya como destino de diversión, lo que "sienta la base de nuestro buen negocio", subraya Zhong.

Zhong ha descubierto que la demanda de bañadores de los consumidores chinos, sobre todo bikinis, ha experimentado cambios significativos en los últimos años. Opina que los gustos ahora son mucho más abiertos y vanguardistas.

"En el pasado, a muchos clientes les gustaba nuestro diseño, pero pensaban que era demasiado vanguardista. Tradicionalmente a las chinas les resulta difícil aceptar estar expuestas en la playa con tan poca ropa", explica.

En contraste, ahora en Sanya se ve más mujeres chinas que "tienen el coraje de mostrar su belleza en la playa y tienen mayores exigencias estéticas en la elección de bikinis", agrega Zhong.

Los elementos tropicales y los colores brillantes en el diseño de la marca colombiana atraen a todos los chinos que viene aquí y que, además, "se interesan por conocer el significado y la cultura latinoamericana que hay detrás", afirma Zhong.

El éxito de Agua Bendita en China se refleja en su volumen de ventas. Esta tienda, que es su tercera en China, abrió en febrero de 2018 y logró ventas de más de 3 millones de yuanes al año, mientras que en 2019 la cifra ya superó los 5 millones de yuanes.

Sin embargo, durante este año, por la influencia de la epidemia de COVID-19, el negocio no fue nada fácil. Especialmente para una ciudad turística como Sanya, ya que "aquí se pierde todo si no hay flujo de turistas", revela Zhong.

Tras el cierre, que duró más de un mes desde finales de enero, y a pesar de su reapertura, la tienda de Agua Bendita en Sanya apenas fue visitada en marzo y abril.

Afortunadamente, a medida que la epidemia fue contenida gradualmente en Hainan, la tienda logró un cambio a partir de mayo y junio, y las ventas fueron alcanzando gradualmente el nivel de años anteriores.

La empresa aprovechó la oportunidad con la recuperación del flujo de viajeros. Según la gerente, lanzaron varias promociones para los huéspedes del hotel Atlantis Sanya, así como diversos descuentos de al menos el 50 por ciento para cada visitante.

"Gracias a las eficaces medidas contra la epidemia tomadas por la ciudad, hemos podido reanudar el negocio normalmente lo antes posible. Nuestras ventas en julio casi se duplicaron interanualmente, lo cual es una gran sorpresa", revela Zhong.

Desde julio, dado que la situación epidémica en el país se ha estabilizado, la reanudación de viajes entre provincias y la nueva cuota de compras libres de impuestos favorecieron el flujo de consumidores en Hainan.

Según la Administración General de Aduanas, en la primera semana de implementación de la nueva política de compras libres de impuestos en Hainan, los turistas gastaron 450 millones de yuanes en compras, con exenciones de impuestos diarias de 9,39 millones de yuanes, lo que representa un aumento del 58,2 por ciento respecto de la primera mitad del año.

Además, el negocio hotelero también evidenció la recuperación turística. La tasa de reserva de habitaciones del hotel Atlantis Sanya en julio superó el 90 por ciento, superior al mismo período del año pasado. Según responsables del hotel, muchas habitaciones a principios de agosto también se han agotado.

En la actualidad Zhong tiene otro trabajo: negociar con otros hoteles en Sanya para satisfacer las crecientes demandas de bikinis de las huéspedes, gracias a que la reputación de esta marca se ha difundido rápidamente entre grupos de amigas.

Sin mucho tiempo para descansar, esta joven gerente recibe cada día a muchedumbres de visitantes y asegura que su sueño no sólo es embellecer el estilo de las turistas chinas a través de sus trajes de baño, sino también hacer que sus vidas sean más felices.