Las horquillas o agujas para cabello son largas, usadas por las mujeres desde la antigüedad para fijar los peinados. En los Registros Históricos, los bufones llevan “pendientes por delante y horquillas por detrás” (“前有堕珥,后有遗簪”). Du Fu, en su poema ‘Visión Primaveral’(《春望》), menciona “Acaricio mis blancos cabellos. Crecen tan débiles que ya no pueden sostener la horquilla”( “白头搔更短,浑欲不胜簪”).
Muchas minorías étnicas de China emplean este objeto para decorar los peinados, con numerosas formas llenas de implicaciones culturales.
En las Dinastías Tang, Song y otras posteriores, estos complementos para el cabello se fueron popularizando. En los frescos de Duanhuang, de la Dinastía Tang, así como en otras pinturas de esta época, las mujeres aparecen llevando horquillas. En los registros de la Dinastía Song, se menciona que “en el sexto año del reinado del Emperador Yuanjia, las mujeres ataban sus cabellos... decorando sus cabezas con horquillas” (“宋代元嘉六年民间妇女结发者,...头上有花插簪梳等饰”). Lu You, un poeta Song, escribió en su obra ‘De Camino a Sichuán’ (《入蜀记》)que las mujeres del suroeste de China llevaban peinados que comprendían “seis horquillas de plata, con peinetas de marfil tan grandes como una mano” (“插银钗至六只,后插大象牙梳,如手大”).

Bajo la Dinastía Ming (1368-1644) y Qing (1644-1911), las horquillas presentaban diversos estilos. Los más comunes incluían flores, pájaros, peces, insectos y bestias. Las flores solían ser ciruelos, lotos, crisantemos, melocotoneros y peonías.
Las horquillas eran un regalo muy común de los hombres a sus amantes. Las mujeres las recibían como prenda de amor de sus novios. Muchas miserias de amor ocurrieron entorno a una horquilla. Hoy en día, este tipo de arreglo para el cabello sigue siendo muy popular y se presenta en innumerables formas.