Según un dicho chino, la visita será incompleta si se pierde la Gran Muralla o el pato asado de Beijing, que es una excelente opción si desea comprender más sobre la cocina, la cultura y las costumbres chinas.

Se cree que el plato, al igual que la tradición del pavo asado en América, debe su origen al ganso asado que sigue siendo popular en Europa en ocasiones festivas. Los occidentales como Marco Polo trajeron ciertas costumbres europeas a China y pueden haber introducido el concepto de asar aves de corral a sus anfitriones chinos durante la dinastía Yuan (1271-1368). Los patos habían sido domesticados en China durante mucho tiempo y los patos gordos resultaron un excelente sustituto del ganso de la misma manera que los colonizadores estadounidenses encontraron el pavo nativo. Sin embargo, hay otra escuela de pensamiento basada en ciertos registros que muestran que la historia puede remontarse a las dinastías del Norte y del Sur (420 - 589). Hasta la dinastía Song del Sur (1127-1279), los patos se asaban en el área alrededor de Jinling, hoy Nanjing. Sin embargo, los gobernantes posteriores de la dinastía Yuan trasladaron su ciudad capital a Beijing desde Jinling y se llevaron su cocina, haciendo que este plato fuera popular en la ciudad que eventualmente lo convertiría en su propia especialidad.

Los patos se asaron originalmente en un horno de convección convencional hasta la dinastía Qing (1644-1911) cuando este plato se convirtió en un manjar en el menú imperial y fue muy apreciado por los emperadores y otros miembros de las clases dominantes. Los patos utilizados durante este período eran de una raza especial, a saber, el pato blanco de Beijing y se empleó un nuevo método de cocción, suspendiendo los patos sobre la llama en un horno abierto. Estos dos métodos tradicionales de cocción han dado lugar a las dos principales escuelas actuales de preparación de pato asado.

El método inicial ha sido perpetuado por muy pocos restaurantes, entre los que el restaurante Bianyifang (Conveniente y Confortable), establecido en 1861, es el más famoso. Allí se sirve pato asado de Beijing con un sabor tradicional bien conservado. El segundo método es relativamente conocido y utilizado con gran éxito por el restaurante Quan Ju De. Hoy, Quan Ju De se ha convertido en una marca representante de esta deliciosa comida para muchos chinos y visitantes extranjeros.