Colocado en una vitrina, un martillo de madera ha atraído a una multitud de espectadores que asisten a una exhibición en el Museo Nacional de China en el centro de Beijing.

El martillo produjo cambios dramáticos en la vida del pueblo chino cuando en 2001 fue hecho sonar para anunciar la admisión oficial de China a la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Se trató de un evento monumental cuyos inicios se remontan a 1978, cuando China anunció la reforma y la apertura que transformó el país.

En la exhibición para conmemorar el 40° aniversario de la reforma y la apertura del país, un área está dedicada a la apertura y al creciente compromiso de China con la economía mundial.

En 1978, China contribuyó con 3,1 por ciento al crecimiento económico mundial. Cuarenta años después, se ha convertido en el principal motor de la economía global, con 31,6 por ciento del crecimiento global en 2016, y 27,8 por ciento en 2017, señaló el Buró Nacional de Estadísticas (BNE) de China.

China también llevó a cabo pruebas para abrir más su mercado para atraer una mayor inversión extranjera, incluyendo la apertura de la puerta a empresas exclusivamente con inversión extranjera, reducción de impuestos, establecimiento de zonas experimentales de libre comercio (ZLC) y la implementación de listas negativas, que se han reducido gradualmente.

En abril, China aprobó el establecimiento de su doceava ZLC en la provincia insular sureña de Hainan. En junio anunció una nueva lista negativa para inversión extranjera en la ZLC experimental, reduciendo el número de ítems de la lista de 95 a 45.

La inversión extranjera directa en China continuó aumentando rápidamente en las últimas cuatro décadas. La inversión extranjera directa en China fue de apenas 920 millones de dólares en 1983, pero se disparó a 131.000 millones de dólares en 2017, señalan datos del BNE.

Una sección de la exposición que presenta la Iniciativa de la Franja y la Ruta muestra cómo el comercio exterior ha impulsado el multilateralismo y la cooperación ganar-ganar.

Propuesta en 2013, la Iniciativa de la Franja y la Ruta prevé redes de comercio e infraestructura que conecten Asia con Europa y Africa.

El comercio total de China con países a lo largo de la Franja y la Ruta en los últimos cinco años superó los 5 billones de dólares, con un promedio anual de crecimiento de 1,1 por ciento, declaró en agosto el viceministro de Comercio Qian Keming.

Durante el período, la inversión directa combinada de China en esos países aumentó 7,2 por ciento anualmente en promedio, dijo Qian.

"Hace más de 2.000 años, el primer enviado de China a Occidente abrió una nueva era de prosperidad en el continente euroasiático", dijo a los visitantes Wang Chusha, un guía del museo.

"La iniciativa ha heredado el espíritu de inclusión de la antigua Ruta de la Seda, y conducirá al mundo a un futuro aún más brillante", expresó.