El polen de los sauces se dejó ver en los autos estacionados y en un vendedor de fruta en la calle Huixin Dongjie en el distrito de Chaoyang en Beijing el lunes.

El gobierno municipal de Beijing trata de lidiar con la gran cantidad de polen de sauces y álamos que flotan por toda la ciudad.

Pese a que esta especie de pelusa puede significar un toque romántico cuando no es numerosa, también puede causar problemas en el tráfico, ensuciar calles y ser un dolor de cabeza para quienes padecen de alergias.

Para resolver el problema, la Oficina Municipal de Paisajes y Silvicultura de la capital indicó que podará los árboles y aplicará químicos este año para limitar la producción de polen. Además reemplazará algunos de ellos con otras especies que reduzcan paulatinamente este inconveniente.

Asimismo, se prevé el uso de chorros de agua de alta presión para aminorar la pelusa flotante y ha solicitado a los departamentos de limpieza urbanos que despejen las calles oportunamente.

De acuerdo con la oficina, la capital cuenta con 2 millones de sauces y álamos, los cuales producen polen en abundancia durante cerca de un mes cada primavera.

El experto en ciencias forestales y miembro de la Academia de Ingeniería de China, Shen Guofang, señaló que el tema no pasa solamente por la poda de los árboles.

"Los beneficios ecológicos de árboles en plenitud sobrepasa largamente la molestia que puede provocar esta especie de pelusa”, apuntó el académico. "Si los cortamos, el ambiente natural de la ciudad se verá perjudicado".

Álamos y sauces representan el 5,4% de los árboles de Beijing, según el departamento municipal.

El consultor del Consejo de Estado, Liu Xiuchen, quien ha trabajado en el sector paisajístico y en jardinería por décadas, subrayó que en los años 50, el gobierno no contaba con los recursos suficientes para dar verdor a la ciudad capital, por lo que los sauces y los álamos de rápido crecimiento y bajo costo eran la mejor opción en ese tiempo para resolver el problema, de ahí que se se plantaron en cantidad.

Estos árboles producen polen como parte de su proceso de reproducción. El gobierno local frenará el uso de su versión femenina para limitar su número.